desulfuración de gases fluidos
Con la desulfuración de gas fluido, un método de alta tecnología, se ha ideado una forma de eliminar el dióxido de azufre (SO2) de corrientes de gas. Su función principal es aliviar la contaminación del aire. El dióxido de sulfhidrilo puede ser recolectado y procesado en ácido sulfúrico u otros salidas rentables a un costo compatible con la implementación de esta tecnología. Emplea un reactor de lecho fluidizado que logra el contacto gas-sólido y captura el sorbente de la piedra caliza u otros materiales inyectados en la corriente de gas. El dióxido de azufre reacciona con el sorbente para formar sólidos que son fácilmente recuperables y pueden ser utilizados posteriormente en el procesamiento químico. Así, se ha encontrado que este método es tanto eficiente como efectivo en la eliminación de altas concentraciones de dióxido de azufre bajo diversas temperaturas y composiciones de gas. La desulfuración de gas fluido tiene una amplia variedad de aplicaciones, incluyendo en el tratamiento de emisiones de centrales eléctricas que queman carbón, procesos de calefacción y refinación de petróleo.